Encuentra tu Zen con estas 5 Técnicas

Zen es el título de más de cuatrocientos libros publicados. Es un tema que ha atraído el interés durante miles de años. Prácticamente todas las culturas que se te ocurran tienen algún enfoque para alcanzar este estado. El Zen se trata de vivir el momento, observar y experimentar las cosas sin juzgar ni dudar. Aquí hay 5 formas de encontrar tu Zen, sea cual sea.
1. Calma la mente con el diálogo interno
Existen muchas técnicas para calmar la mente. Algunos de los más populares son la oración, la meditación y el diálogo interno. El diálogo interno es hablar contigo mismo. Cuando hablas en voz alta, le das a tu cerebro algo en qué pensar además de aquello en lo que se ha estado concentrando. Esto le facilitará relajarse y concentrarse en otra cosa. Durante estos pequeños momentos de inactividad, piensa en lo que dirás la próxima vez que alguien te pregunte cómo te va el día o qué dirás cuando alguien te pregunte cómo se ve con su camisa nueva o si debería seguir adelante y pedir postre.
2. Encuentre un socio responsable
Encuentre un socio responsable. Esta persona es tu aliada, tu animadora, tu espejo. Ambos están en el mismo camino para alcanzar sus metas y esta persona estará ahí para asegurarse de que mantengan el rumbo.
Lo primero que debe hacer es encontrar uno o dos compañeros de apoyo que puedan ser sus socios responsables y mantenerlo encaminado. La mejor manera de encontrar a alguien así es elegir a alguien que ya haya logrado objetivos similares a los tuyos y preguntarle si estaría dispuesto a ayudar. Si no conoce a nadie que haya hecho lo que usted quiere hacer, publique una publicación en las redes sociales o en los foros comunitarios locales preguntando si alguien estaría interesado en trabajar con usted como socio responsable. Puede que sean necesarios algunos intentos para encontrar a alguien compatible, ¡pero recuerda que existe la persona adecuada!
3. Tener una práctica física
Reserva un tiempo cada día para practicar. No tiene por qué pertenecer, pero tiene que suceder a diario. Muchas personas consideran que temprano en la mañana es mejor porque están más tranquilos y concentrados a esa hora. Encuentre lo que funcione mejor para usted y comprométase con ello. Programa tu práctica a la misma hora todos los días para que se convierta en parte de tu rutina. Esto es esencial para progresar en tu práctica. No es necesario inscribirse en un gimnasio ni comprar equipos para practicar yoga, qigong o cualquier otra forma de disciplina física. Puedes realizar estos ejercicios en la comodidad de tu hogar.
El principal beneficio de la práctica física es que te permite tener algo que hacer con tu cuerpo cuando te sientes estresado o abrumado. Al practicar yoga, tai chi, qigong o cualquier otra forma de actividad física, estás utilizando tu cuerpo de manera saludable en lugar de recurrir a conductas no saludables.
4. Nutre el cuerpo
Empiece por comer más frutas y verduras con regularidad. Esto le dará a su cuerpo los nutrientes que necesita para funcionar correctamente y lo dejará sintiéndose satisfecho por más tiempo que los alimentos procesados. Consuma cereales integrales con la mayor frecuencia posible en lugar de pan blanco y productos de pasta. Estos cereales integrales aportan vitaminas y minerales que los alimentos procesados no contienen. Elija carnes magras como pescado y pollo en lugar de carnes rojas, ya que no contienen tanta grasa ni colesterol como las carnes rojas. Evite la comida chatarra, ya que suele estar llena de ingredientes artificiales que no son buenos para el cuerpo ni para la mente.
Una alimentación saludable comienza con una dieta bien equilibrada. Encuentre recetas que incluyan una buena combinación de proteínas, verduras, cereales integrales y frutas. Planifique sus comidas con anticipación, compre en consecuencia y manténgalas a la vista. De esa manera, no tendrá que correr al mercado para comprar un refrigerio rápido con alto contenido de grasa y azúcar.
5. Expóngase a la naturaleza
Una de las mejores formas de relajarse es salir a caminar o sentarse junto a un arroyo o lago. Incluso si es sólo por unos minutos cada día, aún puedes sentir los beneficios. Solo asegúrese de elegir un lugar cercano y seguro, como un parque o sendero cercano, para no tener que viajar demasiado lejos de casa.
Una sola caminata no necesariamente reducirá su nivel de estrés, pero el impacto es acumulativo: cuanto más tiempo esté en la naturaleza y más tiempo y atención le dedique, mejor será para su salud mental. Desafortunadamente, mucha gente vive en ciudades donde estas actividades no son posibles. La buena noticia es que hay algunas cosas sencillas que puedes hacer para incorporar la exposición a la naturaleza en tu vida diaria.
Puedes optar por tener algunas plantas en el interior. No tiene que ser nada sofisticado, bastará con un par de plantas bonitas en la mesa o en el alféizar de la ventana. Si no te gusta cuidar las plantas, consigue una artificial para que no se te muera mientras estás ocupado con tu vida y trabajando fuera de casa.