Creando Nuevos Hábitos

Los hábitos son los componentes básicos de nuestras actividades diarias. Estos refuerzos basados en recompensas se suman para formar nuestras rutinas y vidas diarias. Los hábitos se componen de tres componentes: una señal, una rutina y una recompensa. Sin embargo, de lo que estamos hablando hoy es de establecer nuevos hábitos en su vida que lo llevarán al crecimiento y al progreso en todas las áreas de su vida.
La razón por la que es tan difícil crear nuevos hábitos es que no surgen de forma natural. A medida que comienza a desarrollar un nuevo hábito, está luchando contra su propia naturaleza. Esto es cierto sin importar qué tipo de hábito estés tratando de crear. Si quieres hacer más ejercicio, estás luchando contra tu pereza; si quieres estudiar más, estás luchando contra la distracción; si quieres comer mejor, estás luchando contra el impulso; si quieres hacer amigos más a menudo, estás luchando contra tu introversión. La clave es que no es solo aleatoriamente difícil; es difícil por una razón. Es difícil porque hay reacciones naturales que empujan contra el hábito. Eso significa que se vuelve más fácil con el tiempo. A medida que las reacciones se vuelven menos fuertes, el hábito se fortalece.
Los tres pasos para formar hábitos son:
1. Comience con una señal
Una señal es un desencadenante que le recuerda que debe realizar el comportamiento. Por ejemplo, desea cepillarse los dientes después de cenar. La señal podría ser cenar, o podría ser ver el fregadero después de cenar.
2. Facilita el comportamiento
El comportamiento es lo que desea adquirir en un hábito, como cepillarse los dientes después de la cena. Facilita el comportamiento. Cuantos más obstáculos haya en tu camino, menos probabilidades tendrás de hacerlo. Así que asegúrese de que cualquier señal que use sea fácil de obedecer. Si tienes problemas para cepillarte los dientes por la mañana porque tienes prisa, tal vez puedas reservar un tiempo para cepillarte los dientes antes del desayuno, o usar un cepillo de dientes eléctrico que te lo facilite.
3. Agregue recompensas por completar el comportamiento
La recompensa es lo que te convence de que vale la pena hacer el comportamiento incluso cuando no hay mucha presión para hacerlo de inmediato. Por ejemplo, cuando estaba aprendiendo francés en la escuela secundaria, me gustaba que mi clase de francés fuera al mismo tiempo que mi clase favorita (filosofía), así que planeaba con anticipación y me llevaba mi libro de francés para poder leerlo mientras esperaba. clase. Si hubiera pospuesto mi francés hasta después de la clase de filosofía, me habría sentido muy presionado al pensar en ello.
La idea de formar nuevos hábitos parece bastante simple, pero puede ser una de las cosas más difíciles de hacer. Puede parecer que necesita revisar completamente su vida para hacer grandes cambios, pero la verdad es que muchos pequeños ajustes pueden acercarlo a sus objetivos.
Aunque no sepa por dónde empezar, esperamos que estos consejos le ayuden a dar el primer paso para formar un nuevo hábito.